Descubren técnica no invasiva para estimular el cerebro y tratar enfermedades mentales
Las enfermedades mentales se han convertido en la principal causa de discapacidad en los países avanzados, y más del 30% de las bajas de larga duración están relacionadas con enfermedades cerebrales, cuyos tratamientos solo tienen resultados limitados.
Sin embargo, un equipo de científicos ha desarrollado una técnica revolucionaria llamada inferencia temporal, que busca lograr efectos similares a la estimulación cerebral profunda, pero sin necesidad de cirugía invasiva.
La estimulación cerebral profunda (ECP) ha demostrado ser efectiva para algunas personas con enfermedades neurológicas sin solución, pero su aplicación requiere de una cirugía en la que se implantan electrodos en el cerebro. Esto puede tener riesgos y complicaciones.
En cambio, la inferencia temporal utiliza campos eléctricos colocados sobre el cuero cabelludo para actuar sobre grupos específicos de neuronas. Un experimento realizado con 20 voluntarios sanos demostró que es posible actuar sobre neuronas concretas sin necesidad de cirugía ni efectos secundarios.
Esta técnica podría ser muy útil para tratar síntomas del alzhéimer, la epilepsia o la esquizofrenia, así como mejorar las capacidades cognitivas de personas sanas.
Sin embargo, antes de que pueda ser utilizada fuera del laboratorio, la técnica aún debe mejorar en precisión y potencia.
Especialistas en estimulación cerebral profunda sugieren que estas nuevas técnicas podrían ampliar los beneficios de la estimulación quirúrgica y ser una alternativa menos invasiva.
En el futuro, la técnica podría incluso permitir la autoestimulación en el hogar, aunque aún hay desafíos técnicos que resolver, como la estimulación continua y las sensaciones incómodas que podría ocasionar.
Además, la combinación de esta nueva técnica con técnicas de imagen podría ayudar a los científicos a comprender mejor la formación de memorias y el aprendizaje.
Con este avance, se abre una puerta a la esperanza para millones de personas afectadas por enfermedades mentales. La investigación continúa y se espera que en un futuro cercano la técnica sea una realidad que permita mejorar la calidad de vida de muchas personas.