Tesla planea construir una nueva fábrica en México, uniéndose a otros fabricantes de automóviles que expanden su presencia al sur de la frontera con Estados Unidos.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, dijo que la fábrica de la firma de autos eléctricos estará en Monterrey, a unas tres horas en auto desde Texas.
Se espera que Tesla comparta más en una presentación a los inversores el miércoles.
México ha expresado anteriormente su preocupación sobre cómo la demanda de agua de la planta podría afectar la región.
Pero López Obrador dijo que había recibido compromisos del jefe de Tesla, Elon Musk, que ayudaron a aliviar esas preocupaciones.
México está tratando de posicionarse como ganador a medida que las tensiones entre EE. UU. y China interrumpen las cadenas de suministro tradicionales.
«Esto representará una inversión significativa y muchos, muchos empleos», dijo López Obrador en una conferencia de prensa el martes.
El presidente de EE. UU., Joe Biden, ha destacado las reglas establecidas en EE. UU. para que los automóviles sean elegibles para nuevos subsidios incluidos en un plan de gasto masivo para combatir el cambio climático aprobado el año pasado.
Pero las reglas hacen excepciones para Canadá y México, que ha visto crecer su papel en la fabricación de automóviles a medida que las empresas estadounidenses miran fuera del país para reducir costos.
Esta será la tercera fábrica de Tesla fuera de los EE. UU. después de que la compañía abriera plantas en China y Alemania en los últimos años.
Reuters informa que la fábrica más nueva de Tesla representa una inversión inicial de $ 1 mil millones, que podría crecer a $ 10 mil millones con el tiempo.
La vicecanciller mexicana, Marta Delgado, dijo a Milenio Televisión que la inversión vale «más de 5.000 millones de dólares» y que la planta producirá alrededor de un millón de vehículos al año.
Otro funcionario mexicano, que no fue identificado, dijo a la agencia de noticias Reuters que la planta sería la «gigafábrica» de Tesla, que produciría vehículos, incluida su camioneta y su auto deportivo.
La compañía no respondió a una solicitud de comentarios sobre su última expansión.
Tesla, al igual que otros fabricantes de automóviles, espera que las compras de vehículos eléctricos crezcan rápidamente en los próximos años a medida que los conductores recurran a un transporte más ecológico.
La confirmación de los planes de Tesla llega pocas semanas después de que BMW anunciara que invertiría en una fábrica en México. Ford también fabrica su SUV eléctrico en el país.
El año pasado, General Motors anunció planes para construir una fábrica de autos eléctricos en México, lo que llevó al sindicato United Auto Workers a calificar la decisión como una «bofetada».
Las inversiones en México han sido observadas de cerca como una prueba del clima de inversión bajo el populista de izquierda López Obrador, quien fue elegido en 2018.
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