Un estudio publicado en la revista Nature Communications ha revelado que la gripe aviar podría convertirse en una nueva pandemia si salta de nuevo a los humanos. Los científicos han iniciado una investigación intensiva para combatir esta enfermedad, considerando que la edición genética podría ser una solución efectiva.
Según los investigadores, la edición de una proteína en los pollos llamada ANP32A, junto con la supresión de dos genes asociados a esta proteína, ANP32B y ANP32E, podría impedir la replicación del virus de la gripe aviar. Esta enfermedad se encuentra muy extendida en Asia, Europa, África y América, y ahora existe preocupación de que llegue a la Antártida.
La gripe aviar afecta principalmente a las aves silvestres, pero también tiene un alto costo económico para los ganaderos y representa un riesgo para la salud humana. Hace algunos años, los científicos lograron aislar la proteína que alberga el virus, lo que permitió dar el primer paso para crear pollos resistentes a la gripe aviar.
De acuerdo con el estudio, los pollos cuya proteína ANP32A ha sido editada genéticamente son resistentes a la gripe A y se recuperan más rápidamente de la enfermedad. Los investigadores creen que, al realizar una edición adicional en esta proteína y suprimir los otros dos genes asociados, podrían prevenir la replicación del virus por completo.
Sin embargo, es necesario continuar realizando estudios para garantizar que la salud de los animales no se vea afectada por esta edición genética y para verificar la efectividad en la eliminación del virus. La gripe aviar en las granjas representa un peligro de contagio en los humanos, por lo que es importante seguir investigando y buscando soluciones.
En conclusión, la gripe aviar podría convertirse en una pandemia si logra saltar de nuevo a los humanos, pero los científicos están trabajando arduamente en una posible solución a través de la edición genética. La modificación de la proteína ANP32A y la supresión de los genes asociados podrían prevenir la replicación del virus y proteger tanto a los animales como a los humanos. Sin embargo, es fundamental seguir investigando y asegurar que esta edición genética no tenga efectos negativos en la salud animal.